En algún lugar de Akron, Ohio, una familia pasó por uno de los momentos de más tristeza y desesperación. La perdida de su pequeño perro, Buddy, paralizó a la familia, más a la pequeña Madison Wallace, quien lloró descontrolada por la perdida de su peludo amigo.
Afortunadamente por la mente de su madre pasó la idea de compartir el llanto de la pequeña en redes sociales, donde se viralizó con fuerza por la emotividad que generó su llanto.
Días después, un sábado (para ser exactos), una mujer contactó a la familia Wallace, pues había encontrado al buen Buddy, a quien dio resguardo hasta saber quien era su dueño para regresarlo.
Gracias al microchip implantado en Buddy, la mujer obtuvo los datos necesarios para regresar a Buddy a casa.
Las redes sociales nuevamente lloraron, pero esta vez de felicidad, pues la madre compartió la feliz noticia con todos para hacerlos partícipes de su enorme alegría.
Ojalá esta medida y el apoyo brindado a esta familia marque la pauta para que más peludos regresen con bien a su hogar.
