Que mejor manera de darnos cuenta lo imbéciles que somos como humanidad, que con esta triste historia.
En las hermosas playas de la Habana, Beirut, un grupo de turistas hizo alarde de su estupidez, al usar una tortuga manerina, viva, como objeto exótico para tomarse fotografías.
Según varias fuentes, los turistas pensaron que sería buena idea posar a sus hijos sobre la tortuga y tomarles una selfie. Acción que obviamente a causado repudio en las redes sociales.
Para colmo, los pisotones y el peso de los niños le causaron una herida a la tortuga, quien solo pudo observar como los turistas abusaban de ella para conseguir una p#ndeja selfie.
Afortunadamente la tortuga fue liberada y regresada a su habitat, pero se llevó un pequeño recuerdo de los turistas, una herida en la cabeza.
Hasta cuando dejaremos de ser tan imbéciles?